Por qué después del verano muchas relaciones se rompen: un análisis de las razones y estadísticas recientes en España, y algunos “tips” de AURA Matchmaking.
Cada año, al final del verano, muchas parejas experimentan una crisis que, en algunos casos, termina en ruptura. Este fenómeno no es nuevo y afecta a personas de diferentes edades y contextos. A través de los años, diversos estudios han investigado por qué este período se convierte en una “temporada alta” para las separaciones.
El “Efecto Vacacional” y la realidad de las rutinas.
El verano suele ser un tiempo de descanso, relajación y vacaciones, donde las parejas buscan desconectar del estrés cotidiano y pasar más tiempo juntas. Sin embargo, este tiempo compartido puede generar tensiones inesperadas. Durante el año, las rutinas laborales y responsabilidades diarias permiten a muchas parejas evitar confrontar ciertos problemas, pero el verano, al ofrecer más tiempo libre, puede exponer conflictos latentes.
Pasar demasiado tiempo juntos, sin el “escape” del trabajo u otras actividades, puede amplificar diferencias en expectativas, deseos o formas de manejar el tiempo libre. A esto se suma la presión de tener que “disfrutar” y hacer que las vacaciones sean perfectas, lo que puede elevar los niveles de frustración si las cosas no salen según lo planeado.
Cambios de perspectiva y redefinición personal.
Las vacaciones de verano también ofrecen un espacio de reflexión personal. El cambio de entorno, los viajes y el tiempo de descanso pueden dar a las personas una nueva perspectiva sobre su vida y, en algunos casos, sobre su relación. Algunos aprovechan este tiempo para reevaluar si la relación sigue siendo satisfactoria o si, por el contrario, sienten que están estancados.
Además, el verano es un período social activo en el que se amplían los círculos de amistades y se conocen nuevas personas. Este contacto puede hacer que algunas personas reconsideren su situación sentimental, al comparar su relación actual con nuevas experiencias o dinámicas más frescas.
Impacto de la rutina post-verano.
El regreso a la rutina diaria después del verano es otro factor importante. Tras las vacaciones, las parejas suelen volver a las obligaciones cotidianas, como el trabajo o el cuidado de los hijos, lo que puede generar una sensación de vacío o desilusión. Las expectativas elevadas puestas en las vacaciones, combinadas con una vuelta brusca a la realidad, generan tensiones adicionales que pueden ser el detonante de una ruptura.
Estadísticas recientes en España.
Un informe reciente de El Consejo General del Poder Judicial en España destacó que, en los últimos años, el final del verano ha sido uno de los períodos más frecuentes para los divorcios. Solo en el tercer trimestre de 2022, se registraron más de 20,000 demandas de divorcio en España, lo que representa un incremento del 5.7% respecto al mismo período del año anterior.
Además, otro informe de una web de citas online menciona que en este período post-vacacional, el 28% de los usuarios de aplicaciones de citas reconocen que inician nuevos perfiles justo después del verano.
En cuanto a los matrimonios, el Instituto Nacional de Estadística (INE) también revela que el índice de disoluciones matrimoniales tiende a aumentar notablemente después de las vacaciones. Entre los meses de septiembre y noviembre de 2023, los registros judiciales mostraron un aumento del 15% en solicitudes de separación con respecto a los meses previos al verano.
Factores culturales en España.
En España, la cultura veraniega juega un papel importante. Con un clima cálido y largas vacaciones en agosto, muchas familias y parejas se trasladan a segundas residencias o realizan viajes largos, lo que puede añadir estrés económico y logístico a las relaciones. Además, el fuerte sentido de comunidad y las reuniones familiares pueden acentuar ciertas presiones sociales, haciendo que algunas parejas reflexionen sobre si están en el “camino correcto” dentro de su relación.
Consejos de AURA Matchmaking para superar la crisis post-verano.
Si bien el final del verano puede ser una época desafiante para las relaciones, no todas están destinadas a fracasar. Des de AURA Matchmaking queremos proporcionaros algunos “tips” para afrontar este período:
- Comunicación abierta: Hablar de los sentimientos y frustraciones de manera abierta y honesta puede evitar que los problemas se acumulen.
- Espacio personal: Mantener un balance entre el tiempo compartido y los momentos de independencia es clave para evitar la sobrecarga emocional.
- Reevaluar las expectativas: A veces, las vacaciones generan expectativas irreales. Volver a la rutina con una mentalidad flexible y realista puede aliviar tensiones.
- Buscar ayuda profesional: Si los conflictos son persistentes, acudir a terapia de pareja o a un “coach” sentimental puede ofrecer herramientas para gestionar mejor las diferencias.
En conclusión…
…el final del verano es un período crítico para muchas relaciones, debido a una combinación de expectativas elevadas, cambios en la dinámica de pareja y el regreso a la rutina. Las estadísticas en España reflejan que este fenómeno es común y creciente.
Sin embargo, con comunicación abierta y una buena gestión de las expectativas, las parejas pueden enfrentar este desafío y no solo evitar la ruptura, si no salir más reforzados.
En AURA Matchmaking queremos ayudar a difundir estos patrones para ayudar a las personas a ser más conscientes de las posibles tensiones y a trabajar proactivamente en sus relaciones antes de que sea demasiado tarde.